SENDA y Gendarmería inauguran centro de tratamiento en penal de Punta Arenas
Un nuevo beneficio, que permitirá a los internos del Complejo Penitenciario de Punta Arenas con problemas de drogodependencia optar a un tratamiento de rehabilitación que mejore su reinserción una vez terminadas sus condenas, se acaba de inaugurar. Esto, como resultado de un convenio nacional suscrito entre Gendarmería de Chile (Genchi) y el Servicio Nacional para la prevención y Rehabilitación del Consumo de Drogas y Alcohol (SENDA).
La ceremonia de corte de cinta de las instalaciones estuvo encabezada por el director regional de Genchi, teniente coronel Patricio Torres; y la directora regional de SENDA, Jenniffer Rojas, quien destacó que “es un orgulloso poder concretar esta sentida necesidad que había de ofrecer a quienes alguna vez han cometido un error en su vida, mejores condiciones una vez que recuperan su libertad y cumplen su deuda con la sociedad. Estamos dando un paso de avance en Magallanes con esta nueva oferta de tratamiento”.
Las instalaciones del Centro de Tratamiento de Adicciones (CTA) , que significó una inversión aproximada de $30 millones aportada por SENDA para la implementación inicial y contratación del recurso de los profesionales que estarán a cargo de esta unidad.
A ello, se suma el aporte de Genchi que redestinó espacios al interior del complejo para habilitar esta dependencia de un total de 640 metros cuadrados, lo que significó una inversión de $10 millones en remodelación del módulo.
“Los reclusos que resulten beneficiarios de recibir tratamiento en este nuevo centro, podrán acceder a un tratamiento multidisciplinario que permitirá solucionar o reducir al menos, el problema de consumo de drogas y alcohol que muchos de ellos en nuestra población penal tienen”, explicó por su parte el director regional de Gendarmería.
24 de usuarios
En total, el Centro de Tratamiento de Adicciones tiene capacidad para 24 usuarios, quienes una vez terminado el proceso de diagnóstico y selección –que está en pleno desarrollo-, entrarán al régimen de intervención que se extenderá por un año.
El trabajo estará a cargo de un equipo de profesionales compuesto por un director y supervisor, un psiquiatra, un psicólogo, un asistente social, un técnico psicoterapeuta y dos funcionarios idóneos del penal.
Algunos de los reclusos que están en proceso de selección tuvieron la oportunidad de conversar con la directora regional de SENDA, oportunidad en la que expresaron sus expectativas de esta nueva oportunidad que se les brinda.
El espacio cuenta con boxes de atención individual y grupal, sala de estar, cocina, patio multiuso y celdas para cada uno de los internos en rehabilitación.