Más de dos mil personas se reunieron en la segunda caminata familiar por la prevención
Con la participación de más de dos mil personas se realizó la segunda caminata familiar por la prevención del consumo de drogas y alcohol, estudiantes, dirigentes sociales, profesionales del área de tratamiento con personas que están rehabilitadas formaron parte de la extensa columna de personas que marcharon para expresar su compromiso a la prevención del consumo y tráfico de drogas.
La Gobernadora de Concepción Andrea Muñoz Araya encabezó la actividad que se inició desde Plaza España, frente a la Intendencia hasta la plaza de la Independencia, “Así como «estamos apoyando todo el trabajo que realiza senda para prevenir el consumo de drogas y alcohol. Creemos que mientras más conversación, menos riesgo y es por eso que hemos puesto especial énfasis promoviendo el diálogo con los padres, madres y responsables de los niños. Necesitamos reforzar este trabajo pues sabemos que este rol de prevención es compartido entre el estado y las familias.»
Bajo el lema “Más conversación, menos riesgo», la actividad se centró en generar consciencia sobre lo fundamental del rol que desempeñan personas significativas y/o con autoridad en el tema (padres, madres, abuelos, familiares, profesores, vecinos). Por tal motivo, se debe promover que estos actores se comprometan en la labor preventiva, especialmente como modelos de conducta, es decir, su ejemplo.
El director regional de SENDA, Bayron Martínez Ulloa, agradeció la asistencia y compromiso a la caminata “Esperamos que esto sea un punta pie inicial para un mes de la prevención que espera desarrollar más de cien actividades de sensibilización con cientos de personas en cada comuna que nos ayude a llegar a lo local. Hoy comenzamos en la capital regional, desde hoy también comenzamos a desarrollar actividades en todas nuestras comunas diciéndole a todos los penquistas, a todas las personas que viven en nuestra región que la prevención se construye con todos y para todos”.
En actividades donde se involucra a la familia donde hay más espacios para compartir se traduce en un menor consumo de drogas; más conversación, más cariño, más abrazos, más preocupación, es menos riesgo de uso de drogas.
