Alumnos de Andacollo conocen los efectos que genera el consumo de alcohol

En el Colegio Parroquial de Andacollo se realizó el primer taller escolar de “Educación y Prevención en Temáticas de Drogas y Alcohol», con la presencia de setenta alumnos de quinto básico de cuatro establecimientos educacionales de la comuna.

Para la ocasión, se prepararon “estaciones educacionales”, en las que de forma lúdica y entretenida se entregaba información a los alumnos, explicando los efectos que genera el consumo de alcohol en las diferentes etapas de la vida.

“He aprendido muchas cosas del alcohol, que le hace daño a nuestro organismo y que no nos ayuda en nada”, explicó Branko Molina, del colegio Nuestra Señora del Rosario.

La jornada estuvo a cargo de monitores especializados pertenecientes a la Facultad de Medicina de la Universidad Católica del Norte. Felipe Gallardo fue uno de ellos, quien junto con felicitar a los menores por la activa participación en la actividad, explicó que “junto a alumnos de Kinesiología estamos realizando diversas actividades que involucran los aspectos motores que se ven alterados con el alcohol. Por eso tratamos de diseñar actividades dinámicas para lograr que los niños aprendan de manera más fácil los daños asociados”.

La actividad se enmarca en un trabajo más amplio que aborda temáticas neurobiológicas implicadas en la programación del cerebro fetal y neonatal, en una línea de investigación liderada por la doctora Paola Haeger, investigadora del Departamento de Ciencias Biomédicas de la UCN.

“Tenemos siete estaciones que explican, por ejemplo, cómo afecta el alcohol en el embarazo o por qué uno ve mal cuando consume. Queremos que los niños entiendan cuáles son los efectos cerebrales que el alcohol produce, para que vean mal, tengan problemas de movimiento o no puedan manejar un vehículo”, puntualizó Haeger.

Esta iniciativa contó con el apoyo de Senda. “Creemos que esta instancia tiene un aspecto muy relevante, porque es recreativa y a partir de la cotidianidad le entrega a los alumnos un mensaje claro de cómo el alcohol y las drogas van afectando su proceso normal de crecimiento”, sintetizó Mauricio Segovia, encargado de la oficina comunal Senda Previene Andacollo.

Esta iniciativa tuvo el financiamiento de la ‎Federación de Asociaciones Latinoamericanas y del Caribe de Neurociencias, la Sociedad Americana de Neurociencias y la Sociedad Chilena de Neurociencias. Además, contó con el apoyo de la Red Latinoamericana de Investigación en Adicción a Drogas y la Academia Científica de Estudiantes de Medicina (ACEM).