Con juegos y mascota «Di-No» previenen las drogas

Tirar dos dados y responder si es recomendable que los niños prueben el alcohol, o  si conocen el daño que provoca la pasta base, son algunas de las interrogantes que los jóvenes deben resolver  para ganar uno de los regalos que Senda está entregando como parte de su campaña veraniega.

La iniciativa denominada “Comparte este Verano…sin drogas, alcohol, ni tabaco”, ha privilegiado en la región el uso de juegos y actividades participativas para promover el diálogo en torno a la prevención del consumo de drogas.

Según lo explica el director regional de Senda, Freddy Porcille, “en la medida que los niños, jóvenes y las familias en general, puedan responder sus inquietudes y aprender jugando sobre estas sustancias, podremos disminuir los factores de riesgo que los exponen ante un eventual consumo”.

ACTIVIDADES

Hasta la fecha, la campaña ha recorrido los diversos espacios y actividades veraniegas, beneficiado directamente a más de 1.600 niños y jóvenes de la región, esto con el apoyo de servicios públicos y organizaciones, como la ONG Juntos por la Vida.

Por ejemplo, los beneficiarios de los campamentos de verano del Daem y Junaeb, tuvieron la oportunidad de jugar con el equipo de Senda, además de aprender con los talleres preventivos personalizados que realiza el equipo comunal Senda Previene Arica con su mascota, el dinosaurio “Di-No” a las Drogas.

También la iniciativa estuvo presente en el campeonato internacional de rugby “Seven a Side Arica 2015”, donde los organizadores valoraron la participación de Senda, fomentando la vida sana en las delegaciones y público asistente.

Para este martes la prevención se trasladará al campamento de verano, organizado por el Obispado de Arica en Villa Frontera, realizando competencias en equipos para los 160 jóvenes asistentes, de manera de seguir integrando la recreación con el diálogo sobre la prevención de drogas.

Desde Senda agregaron que es fundamental realizar campañas durante el verano, pues es una época donde los jóvenes en edad escolar disponen de mayor tiempo libre y la oferta de sustancias nocivas se incrementa en lugares de afluencia turística.