Con Zumba lanzarán campaña “Empezar a Conversar, eso es lo Importante”
Como una forma de reforzar de forma positiva el vínculo entre los padres, madres y/o adultos responsables, y también los hijos e hijas de una familia, el Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de Drogas y alcohol, Senda, realizará el lanzamiento regional de una campaña denominada “Empezar a Conversar, eso es lo Importante”.
Martha Palma directora regional del organismo explica que “el objetivo central de la campaña es prevenir el consumo de alcohol y otras drogas en niños, niñas y adolescentes, a través del fortalecimiento de las habilidades parentales de padres, madres y adultos responsables”.
“Queremos que la comunidad sepa que tenemos un fono drogas, que funciona las 24 horas, y que está disponible para consultas y orientaciones, ya que a veces como padres, no sabemos cómo responder o actuar frente a situaciones entorno al consumo de una droga, siendo esta herramienta anónima y confidencial”, agregó la directora de Senda.
Zumba Familiar
El pasado domingo 15 se lanzó la campaña a nivel nacional, la que contempla spot en canales de televisión y frases radiales, es por tal motivo que Senda Atacama da luz verde a esta campaña invitando a la comunidad a participar de una zumba familiar en el costado del teatro municipal de la calle Alameda, este viernes 20 de noviembre. “Gracias al municipio de Copiapó, el Instituto Nacional del Deporte y la participación de la Fundación de las Familias, estamos organizando esta actividad que esperamos sea muy entretenida y donde mostraremos los spot que contempla esta campaña”, puntualiza la directora de Senda.
Cifras
Según datos y estudios del Senda, las edades de inicio de consumo en los jóvenes es cada vez más temprana, de hecho en alcohol, se registra a los 12,7 años, mientras que el tabaco a los 13,6 años.
Otra cifra que bajó notoriamente en los últimos años, es la percepción de riesgo de la marihuana, cayendo más de 25 puntos porcentuales en toda la serie de estudios del Senda en población escolar (21,1% en 2013), mientras que para el uso experimental llegó a 11,7%, un tercio menos respecto de 2009 (30,2%).
No obstante, también los estudios señalan que el consumo de marihuana o cocaína disminuye significativamente en adolescentes cuyos padres están involucrados en el quehacer escolar.
