Como posible e interesante, calificó la directora metropolitana de SENDA, Johanna Olivares, una futura asociación con el Ejército de Salvación para contar con intervenciones en Santiago Centro y otras comunas donde existen barrios vulnerables.
El objetivo es llegar a la población en riesgo con políticas preventivas de la institución, como detección precoz del consumo de drogas, y alternativas de tratamiento, explicó Olivares tras reunirse con el mayor Hernán Espinoza, quien a su vez es comandante divisional del Ejército de Salvación.
“Se trata de buscar alianzas para contar con asociaciones interesantes en la lógica de intervenir en zonas vulnerables, para trabajar de la mano con estas instituciones centenarias, como el Ejército de Salvación, y ayudar a mejorar la calidad e impacto de las intervenciones en grupos poblacionales con resguardos y defensas altas, de difícil acceso”, afirmó Olivares.
Agregó que “no tenemos que perder de vista que el objetivo es insertarse en la comunidad; y prevenir el consumo de drogas y alcohol”.
El Ejército de Salvación tiene 148 años de existencia, está en 126 países, y en Chile lleva 105 años. Sus áreas de trabajo se ubican en salud comunitaria, educación, drogadicción y alcohol, y un programa para personas en situación de calle.
En la institución religiosa trabajan 300 personas en tareas preventivas, que atienden a 1.500 personas que cuentan con el apoyo de la familia. En cada sector, indicó Espinoza, tienen un oficial de zona que verifica y acompaña los seguimientos de las personas con problemáticas de alcohol y otras drogas.
Olivares invitó a la organización a participar de los Fondos Concursables y a consolidar alianzas que buscan sumar, estableciendo sinergias que posibiliten intervenir socialmente en el desarrollo de preventivas, recuperando personas que se integren en el mundo laboral, acción que colabora directamente en el fortalecimiento de la familia.